Remedios caseros dolor de oído
Los 5 mejores remedios caseros para el dolor de oído
© iStock.de / Victor_69Si el médico puede descartar enfermedades graves, el dolor de oído también se puede tratar con varios remedios caseros.
- Estos remedios caseros ayudarán con el dolor de oído
Nuestro órgano auditivo es muy complejo y particularmente sensible al dolor en las áreas externa y media. Las causas del dolor de oído pueden ser igualmente diversas. Las molestias del oído a menudo se desencadenan por inflamación o lesiones, pero también pueden estar asociadas con partes completamente diferentes del cuerpo, como el área de la garganta en el caso de la amigdalitis o las articulaciones de la mandíbula, por ejemplo, después de una operación dental.
Los niños, en particular, suelen tener dolor de oído. La causa de esto suele ser una otitis media aguda, que se acompaña de fiebre. Quienes padecen dolor de oído en la edad adulta suelen tener problemas con el oído externo o con el conducto auditivo externo. Como regla general, una otitis media que causa dolor intenso y repentino y fiebre siempre debe ser examinada y tratada por un especialista. Si se han excluido enfermedades graves, varios remedios caseros pueden ser efectivos contra el dolor de oído.
Estos remedios caseros ayudarán con el dolor de oído
1. Descansar y dormir
No subestime los poderes de autocuración de su cuerpo. En la mayoría de los casos, el dolor de oído se acompaña de agotamiento y síntomas de resfriado como dolor de cabeza o fiebre baja. Por tanto, es aconsejable aliviar el organismo y apoyar sus poderes autocurativos. Nos recuperamos más rápido con mucho descanso y sueño. También debe beber tanto como sea posible para acelerar el proceso de curación del dolor de oído. Si tiene fiebre, su cuerpo pierde líquidos, por lo que es particularmente importante equilibrar el equilibrio hídrico.
2. Bolsitas de cebolla
La cebolla tiene un efecto antibacteriano y, por lo tanto, es un ayudante eficaz contra la inflamación. No en vano la aplicación de bolsitas de cebolla es uno de los remedios caseros más populares para el dolor de oído. Para ello, pica una cebolla y caliéntala sin añadir aceite. Luego envuelve las piezas en un paño de cocina y exprímelas suavemente para que salga un poco de jugo de cebolla. Coloque el paquete preparado no demasiado caliente, pero aún tibio, sobre el oído adolorido. Asegure con un sombrero o diadema y déjelo por 20 a 30 minutos. El calor resultante y los aceites esenciales de la cebolla, que por cierto también son responsables de los ojos llorosos al picar cebollas, alivian el dolor. Alternativamente, puede envolver un puré de papa caliente y colocarlo encima. Los paquetes de cebolla también se pueden colocar fríos. Para ello, corta la cebolla en trozos pequeños y colócalos en un pañuelo. Machaca lentamente la cebolla hasta que el pañuelo se empape en el jugo. Luego, ponte el pañuelo en la oreja durante media hora.
3. Ajo
El ajo puede ser una alternativa a la cebolla para el dolor de oído. También se corta en trozos pequeños y se calienta. Envuelto en un paño de algodón, el paquete se coloca en el oído afectado. O exprime el jugo de los dedos de los pies y lo pone en un paño que luego se pone en el oído adolorido.
4. Calidez
Asegúrese de mantener calientes los oídos doloridos en todo momento, porque el calor alivia la incómoda sensación de tirón y ardor en el canal auditivo. No hay nada de malo en usar un sombrero o una diadema en la casa. El oído afectado también se puede irradiar con una lámpara de luz roja. La distancia entre la lámpara y la oreja debe ser de al menos 50 centímetros y la irradiación debe tener lugar durante un máximo de diez minutos. También puede calentar los oídos doloridos con una almohada de piedra de cereza calentada en el horno o microondas. Sin embargo, el calor siempre debe ser cómodo para que no haya quemaduras.
Si bien el calor es bueno para la otitis media, el frío generalmente se percibe como más agradable cuando hay inflamación en el conducto auditivo externo. En este caso, debe preferir una envoltura fría y húmeda en la oreja. Para ello, empape un paño de algodón o lino en agua muy fría y escúrralo bien. Doble el paño hacia arriba y envuélvalo con otro paño seco. Coloque la envoltura fría en su oreja con un sombrero. Mantenga calientes sus pies y el resto de su cuerpo.
5. Manzanilla
Los aceites esenciales de manzanilla tienen un efecto analgésico y cicatrizante. Un baño de vapor de manzanilla ayuda con una otitis media leve. Para hacer esto, ponga dos cucharadas de flores de manzanilla en agua hirviendo y déjelas reposar durante unos cinco minutos. Luego, mantenga la aurícula sobre el vapor durante unos minutos. También puedes calentar una bolsita de té de manzanilla al vapor y colocarla tibia sobre el oído adolorido. Por cierto, la manzanilla no solo ayuda como remedio casero para el dolor de oído: cuando se inhala, la planta medicinal también tiene un efecto positivo en los dolores de garganta, supuración de los senos nasales o como té contra el malestar estomacal.
6. Sobre mostaza
Una compresa tibia con harina de mostaza también puede aliviar eficazmente el dolor de oído, porque al igual que las cebollas, la mostaza tiene un efecto antibacteriano. Para la envoltura, mezcle un poco de harina de mostaza finamente molida (disponible en la farmacia) con agua tibia hasta obtener una pulpa y extiéndala en el centro de un paño de algodón. Dobla los bordes laterales del paño y presiona el paquete de mostaza en tu oreja. Dejar actuar como máximo diez minutos para no irritar la piel con los intensivos aceites esenciales de semilla de mostaza. Retire la envoltura inmediatamente si la piel se enrojece o se quema severamente durante el uso. No lo use más de una vez al día.
7. Inhalación con aceites esenciales
El dolor de oído ocurre en algunos casos con resfriados, cuando la secreción no puede drenar bien, porque entonces el oído no está adecuadamente ventilado. Aquí la inhalación con aceites esenciales puede ayudar: los aceites de eucalipto, romero, tomillo y abeto son especialmente adecuados.
8. Bebe mucho
Si tiene dolor de oído, definitivamente no debe descuidar: muchos líquidos, idealmente agua sin gas y tés sin azúcar. Una ingesta elevada de líquidos favorece el proceso de curación de las infecciones agudas. Además, se asegura que las membranas mucosas se mantengan húmedas y que la inflamación no pueda manifestarse tan rápidamente.